
La cantante británica Tirzah celebra la maternidad con enigma en su nueva canción y videoclip, “Send Me”, dirigido por Leah Walker.
Misterio. Enigma. Minimalismo. Hechizo. Cuando esta joven artista británica debutó, en 2018, con el sorprendente Devotion (Domino, 2018), estos fueron algunos de los sustantivos que se la asociaron. La prensa no andaba desencaminada respecto a sus virtudes.
No era para menos. Lucía un currículo aún escaso pero muy buenos compañeros de viaje: Mica Levi a la producción y colaboradores como Tricky, Baauer o Mura Masa.
De hecho, su música perfectamente podría situarse en esa línea de vocalistas británicas de sinuoso r’n’b, como Leila Arab, Martina Topley-Bird o Skye Edwards, quienes siempre se han decantado por los ambientes narcóticos, inquietantes, plenos de intriga. Magia negra para noches sin hoja de ruta previa.
Hacía justo tres años que no publicaba nada, y esta “Send Me” es su vuelta. También grabado con Mica Levi (Micachu) a los controles. Y, como todas las canciones de Tirzah, tiene algo que las hace diferentes. Es extraña, exótica, heterodoxa, como todo lo que toca.
El videoclip, dirigido por Leah Walker, es igual de minimalista que la canción a la que sirve. En él se refleja una instantánea subconsciente de un año en el que Tirzah tocaba en directo con regularidad por primera vez.
Y explora la recuperación y la gratitud que experimenta una cantante que ha descubierto el tipo de amor que se comparte entre una madre y un hijo, por primera vez mientras trabaja simultáneamente como artista.
Tirzah no cuenta con el relumbrón de FKA twigs, Grimes o St. Vincent, por solo mencionar a tres estrellas femeninas que juegan en su misma liga. Pero todo apunta a que pronto lo hara. Es solo cuestión de tiempo.