
El exitoso dúo británico vuelve con su infalible receta de música de baile que remite a la disco music y al funk de los años setenta.
Puede que no haya ahora mismo una escena musical más ansiosa por recuperar la antigua normalidad que la del baile. La de los géneros y estilos que nacieron para ser bailados en una discoteca, en un pub, en un gran festival.
Llevamos ya un año y medio sin que se pueda hacer nada parecido. Y las raras veces en que se puede, toca plegar velas antes de la una de la madrugada, que los toques de queda siguen vigentes, como prolongando una realidad que creíamos distópica y está tardando mucho en evaporarse. Quizá haya que acostumbrarse a pasar de un entorno pandémico a uno endémico.
Sea como sea, es tal la cantidad de discos de música de baile que se están editando con sus recintos y receptáculos naturales aún cerrados a cal y canto o funcionando a medio gas, que el día en que se pueda bailar en comunidad hasta altas horas de la madrugada no va a escasear el material nuevo.
Quizá por eso los Jungle, el dúo británico formado por Tom McFarland y Josh Lloyd-Watson, se ha esmerado por componer un tercer disco que sobrepase los 120 beats por minuto y desprenda un contenido más vitalista aún, más contagioso, más pensado para hacernos mover los pies, aunque sea en nuestras casas.
El álbum se llama Loving In Stereo (Caiola Records, 2021), se ha publicado hace solo tres días, es lo más orgánico que han hecho hasta el momento, cuenta con un par de colaboraciones externas (las del rapero norteamericano Bas y la vocalista suiza-tamil Priya Ragu) y vuelve a remitir sin complejos a la mejor música disco y al funk de los años setenta, desde una perspectiva actualizada.
Esta “All of the Time”, con videoclip dirigido por J Lloyd & Charlie Di Placido, es una de sus mejores invitaciones a desmelenarnos y dejarnos llevar por el ritmo. De momento, solo quienes acudan a los conciertos británicos e irlandeses de Billie Eilish, el próximo año, podrán disfrutar de esta y del resto de sus canciones en vivo. Aunque apostamos a que no tardarán en sumarse otras citas continentales, también españolas.
¿Les veremos en verano de 2022 por aquí?