
La artista mallorquina celebra la publicación de esperado nuevo álbum con el quinto corte extraído del mismo.
Qué poderío. Qué fibra. Qué derroche de energía. Maika Makovski no entiende la música sin intensidad. El rock es para ella un magma que abordar con entrega irrenunciable. No importa el formato, el estilo o el registro. Todo lo vive a tope. Y es de celebrar que así sea, tras más de una década de sólida carrera.
La polifacética artista mallorquina acaba de publicar, tras cinco años de silencio creativo, su nuevo álbum, MKMK, un disco que llega con el aval de los estupendos directos en los que fue adelantando su contenido. Quienes tuvimos la suerte de verla sobre los escenarios hace unos meses lo sabemos bien.
Aquellos fueron directos vigorosos, crudos, enérgicos. Auténticas bofetadas de descaro rock ante las que lo más doloroso era permanecer sentados en nuestros asientos. Fue un antídoto, en cualquier caso, tal y como dice ella misma, contra la impotencia y la soledad de unos tiempos tan duros como los que todos hemos vivido.
Siguiendo con la tónica actual de ir adelantando canciones antes de la publicación del álbum, esta «Purpose» es ya el quinto corte que se da a conocer antes de que todo el contenido de MKMK viera la luz. Bueno, o más bien, de forma simultánea, porque el disco está ya disponible desde el pasado viernes 28 de mayo. Su videoclip ha sido realizado por Josep Caballero, con animaciones de Maika.
Ella define así la génesis de la canción: «Es una oración a levantarse de la cama cada día con un propósito que te guíe. La escribí en una época de crisis creativa, pero al final quedó un tema muy vivo, con un sabor new wave y arreglos robóticos y envolventes».