El gran rapero norteamericano de nuestro tiempo vuelve con un suculento avance del álbum que publica mañana mismo.
Quien mucho abarca, poco aprieta. Se suele decir es cuando alguien se mete en tantos fregados a la vez. Cuando un artista pretende dar una visión tan global y musicalmente omnívora de la música que puede llegar a aturdir.
El rapero norteamericano Kendrick Lamar es uno de esos infrecuentes artistas. Tan ambicioso que podría darse un buen batacazo creativo. Pero no. No le ocurre. Siempre sale airoso.
Decimos todos esto porque su nuevo videoclip, que llega tras unos cuantos años sin dar señales de vida discográfica, tiene todo eso. Y seguro que el álbum al que corresponde, que se estrena mañana en todo e mundo bajo el título de Mr. Morale & The Big Steppers (2022), mantendrá las mismas constantes.
Las de un músico concienciado social, política y culturalmente, siempre ávido por dotar a sus canciones de notas de color en forma de influencias del soul, del jazz, del r’n’b o del pop.
En esta «The Heart Part 5», Kendrick Lamar rapea sobre el racismo, la violencia, la cultura afroamericana y los peajes, a veces ingratos, que sufren celebridades del show business, la cultura o el deporte.
Quizá por eso ha optado por transformar su rostro (gracias a la tecnología, y al buen hacer de Dave Free, el directo del clip) en Kanye West, O.J. Simpson, Kobe Bryant, Jussie Smollett o Nipsey Hussle, músico amigo suyo que fue asesinado en 2019. Y es que la historia del hip hop está repleta de bajas demasiado tempranas. Tristemente.
A nivel sonoro, la canción también tiene abundante miga: recuerda mucho a las producciones soul de los años setenta, y de hecho incluye un sampler del «I Want You» de Marvin Gaye, aquella canción de su extraordinario álbum homónimo de 1975, siempre oscurecido por los magistrales What’s Going On (1971 y Let’s Get It On (1973). Kendrick Lamar se sabe heredero de todo ese legado, y lo reivindica con tino y mucho talento.